UNA BUENA DIETA, SIEMPRE FUNCIONA

Una buena dieta, siempre funciona, pero no todo vale en ella. Nunca es justificable dejar de comer determinados alimentos con el fin de adelgazar. Todos los nutrientes que se encuentran en los alimentos, son necesarios para nuestro organismo, esto no significa, que todos los alimentos sean necesarios. Perfectamente podemos vivir sin tomar refrescos carbonatados o bollería industrial (esta última suelen contener grasas saturadas, enemigas de nuestro organismo, tanto para nuestras arterias,
para nuestro corazón, y para nuestro peso). Sin embargo no podemos pasar de comer fruta o verduras o aceite de oliva, si bien es cierto, que también aportan grasas y calorías, son grasas vegetales y ayudan a mantenernos saludables.

Recuerda que algún pequeño capricho, no va a echar por tierra el esfuerzo de semanas, si no lo tomas a diario, sino únicamente de vez en cuando. En la vida debemos incorporar equilibrio, reprimirse continuamente acaba irremediablemente en un atracón.
 No intentes adelgazar por los demás (tu madre, tu marido, tu vecina, tu hija...) encuentra tus propios motivos para hacerlo, seguro que encuentras suficientes.
No nos engañemos, seamos realistas, nuestro físico puede dar un cambio total, si seguimos una alimentación adecuada, correcta, lo que no podemos cambiar es una estructura ósea.
Existe un sinfín de dietas, de fórmulas para adelgazar...pero no todas son tan eficientes ni tan saludables. Tenemos y debemos de huir de dietas populares, monodietas, dietas radicales, que eliminan una parte importante de los alimentos necesarios para el ser humano. Ninguna persona es exactamente igual a otra, ni nos encontramos siempre en la misma situación, ni medimos igual, ni estamos igual de saludables, ni nuestra estatura es la misma,...no siga cualquier dieta por el hecho de que la haya seguido un familiar o un amigo con éxito. Su dieta debe ser individualizada, ajustada a su edad, sexo y características personales (ácido úrico, colesterol...),  hábitos alimenticios, trabajo, actividad física, etc, todo ello condiciona el éxito de un dieta.
 
Es cierto que existen personas con más voluntad que otras a la hora de conseguir un objetivo, pero también es cierto que todos disponemos de esa fuerza interior que nos permite alcanzar metas, sólo hace falta saber como activarla y motivarnos de manera que esa fuerza no nos vuelva a fallar.
Adelgazar, no es algo imposible...tampoco para tí que ya lo has intentado en repetidas ocasiones y seguro que ahora tienes la sensación de que nunca te funcionará ninguna dieta. Precisamente, no te faltan ganas, y la cosa falla, porque tú necesitas algo concreto que esa dieta que estás siguiendo, no te está aportando.
Todos tenemos esa fuerza interior que nos permite alcanzar lo que deseamos, tú también y para ello no puedes permitir que tu mente te traicione, hay que eliminar los pensamientos negativos, mentalizate que esta vez es la primera,sueña como estarás cuando consigas tu objetivo, sueña como quieres estar dentro de unos dias, o unos meses, te sentiras fuerte y decidida. No te culpes cada vez que rompas la dieta, esto minará tu voluntad y tu ánimo, pensarás que has fallado...la dieta no puede suponer una carga.
Marcate cada mañana el objetivo del dia, un objetivo a corto plazo (conseguir respetar la dieta del día)  y marcate también un objetivo a largo plazo, como "volver a entrar en aquellos pantalones que tanto me gustaban". Si algunas vez caes en la tentación y comes un alimento inadecuado, no te sientas culpable,eso no significa que hayas fracasado en la dieta, admite tu fallo, averigua que te ha impulsado a dejarte llevar y rectifica, sé positiva, no te castigues, todos en alguna ocasion hemos comido más de lo que necesitamos, por ansiedad, por estres, por tristeza, por falta de cariño...etc; se han mezclado en el plato alimentos y emociones.
La dieta, no tiene porqué ser un castigo, disfruta de ella!!, sé consciente que perder aquellos kilos que te sobran, te van a proporcionar salud y autoestima, sólo se trata de adecuar la cantidad de alimentos y la frecuencia de las ingestas a tus necesidades nutricionales. Pronto tu aspecto fisico irá mejorando, tu talla bajando y tu voluntad y autoestima por los cielos!!. Date permiso de vez en cuando para hacer un extra, porque la represión no es buena, date un caprichito y compensalo luego con una cena ligera.
La rutina es un gran enemigo de la fuerza de voluntad, así que si empiezas a cansarte de comer siempre los mismos platos, cambia ingredientes.
Tú puedes lograrlo, el esfuerzo tiene premio y la dieta no es un castigo sino una MANERA DE CUIDARTE, DE MIMARTE, DE QUERERTE, de mejorar tus hábitos alimenticios.
Y no olvides moverte MAS, para adelgazar MEJOR!!